"Ser creativos quiere decir no ser prisioneros del tiempo de otros. No tener ni límites ni confines, hasta dar con la idea perfecta que te recompensa por todo ese tiempo que ya no está... Pero en realidad sigue existiendo todavía, solo que bajo otras formas."


"La creación nace de un rayo, de un error respecto al curso habitual de las cosas. No hacemos nada bien hasta que dejamos de pensar en el modo de hacerlo"



martes, 26 de julio de 2011

Un juego de cartas


Nadie quiere oír nunca un no, y mucho menos cuando se trata de amor. Cuando estamos locamente enamorados no nos damos cuenta de lo que pasa a nuestro alrededor, porque a veces las cartas llevan sobre la mesa mucho tiempo y no queremos verlas simplemente porque no nos gusta lo que hay allí.

Pero a veces tampoco hay que darle mucha importancia a la respuesta. A veces hay que pensar en dar lo mejor que uno tiene, jugar sus mejores bazas, porque la verdad es que el amor es como una partida de cartas, tienes que saber jugarlas, fingir a veces, mentir incluso... Y no importa si pierdes porque habrá más partidas, más oportunidades y al final lo único que importará será como juegues. Entonces todo saldrá bien, porque en determinadas ocasiones es mejor dejarse llevar y no forzar las cosas.

¿Qué contradigo eso de que “el fin justifica los medios”? Puede ser… Todo depende de lo que a uno lo importe el fin. 

Sí, el amor es un como juego, sin embargo las personas no somos premios que alguien aspira ganar, no somos muñecos de usar y tirar… Por eso el fin no importa porque no es el jugador el que elige perder o ganar sino que a veces es la otra persona la que decide como acabará el juego… Y entonces, ¿qué hacemos? ¿Nos damos por vencidos y listos? No, entonces jugamos y lo arriesgamos todo, porque da la casualidad de que el que no arriesga no gana.

Cuando se trata de amor nunca se sabe lo que va a pasar pues son dos los que juegan con cartas muy diferentes. En ocasiones solo uno es el que se juega todo, el que se lanza a la piscina de cabeza sin importarle nada más ya que está enamorado y lo que busca es el amor de la otra persona… Un amor que a veces nunca llega… Por eso siempre se empieza jugando con el no, porque eso es lo que uno ya tiene y lo que trata de conseguir es el sí, que a veces nunca llega. Es entonces cuando uno tiene que saber reconocer que ha dado lo mejor de sí y que por lo menos lo ha intentado…


1 comentario:

  1. Oh precioso relato y es cierto siempre hay que luchar por lo que queremos si no nunca hay esperanza

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