"Ser creativos quiere decir no ser prisioneros del tiempo de otros. No tener ni límites ni confines, hasta dar con la idea perfecta que te recompensa por todo ese tiempo que ya no está... Pero en realidad sigue existiendo todavía, solo que bajo otras formas."


"La creación nace de un rayo, de un error respecto al curso habitual de las cosas. No hacemos nada bien hasta que dejamos de pensar en el modo de hacerlo"



martes, 23 de agosto de 2011

Your call...


Espera sentada delante del teléfono. Las manecillas del reloj parecen conspirar contra ella. El tiempo no quiere avanzar... Espera el sonido que anuncia su voz al otro lado del auricular... Esa llamada que como muchas veces antes, le ha ayudado en los malos momentos, le ha reconfortado cuando estaba triste... Esa llamada que le hacía sentirse especial y con la que dejaba de sentirse sola...

Y es que ya nada importa… Solo se arrepiente de todas aquellas palabras cargadas de veneno que le dijo cegada por la rabia la noche anterior, y solo puede pensar en susurrarle palabras de perdón al oído… Porque tiene que admitir que se equivocó… 

Se equivocó…

Pero ella no sabe que esa llamada nunca llegará… Que nunca más volverá a escuchar su voz, porque esa voz ha quedado sepultada bajo las piedras del olvido, condenado a una existencia etérea… 

Solo dos son las cosas que necesita decirle: un “te amo”, un “te necesito”…

Ahora solo le queda llorar sentada delante del teléfono lamentándose por lo que no pudo decir… Por lo que calló sin querer…

Porque ya es demasiado tarde…


jueves, 18 de agosto de 2011

Una realidad, un sueño...


Alguien dijo en algún momento de la historia que cuanto vemos o parecemos no es más que un sueño, dentro de un sueño; así pues, ¿quiere esto decir que no existe realmente una realidad substancial a la que podamos aferrarnos en vida y que la muerte no es más que un paso entre un sueño y otro? Porque Shakespeare dijo una vez que morir es dormir… Y tal vez soñar. Pero cuando ya de por sí todo es un sueño y no hay nada más que eso, ¿cómo sabemos que estamos vivos y no muertos? ¿Cómo somos capaces de comprender una supuesta realidad en la que vivimos, si todo cuanto rodea al hombre no es más que pura y simple banalidad, artefactos, ideas, expresiones, estilos de vida, etc., creados por la mente humana en un intento por hacer más apacible y fácil una existencia que no comprende?

¿Cuánto de verdad hay en lo que creemos conocer con certeza?

¿Qué sería de este mundo si lo hubiésemos hecho de otra manera? ¿Dejaría de ser un sueño? ¿Sería real? ¿Por qué, que hay de real en un unos signos creados por la mano del hombre para ayudar a su comprensión a entender cuanto le rodea y a comunicarse con otros? ¿Qué mecanismo interno hace que cuando pensamos en la palabra mesa aparezca en nuestra mente un objeto compuesto por una tabla horizontal sostenido por una o varias patas? ¿Qué es lo que genera que una frase como cuanto vemos o parecemos no es más que un sueño, dentro de un sueño, genere pensamientos en mi cabeza que no alcanzo a comprender – tal vez por mi inmadurez, tal vez por mi falta de conocimientos –, y para los que todavía no tengo respuesta? Y lo más importante, ¿por qué tan poca gente se cuestiona estas preguntas en algún momento de su vida?
 
Tal vez me equivoque – lo cual es muy probable –, pero si es así, ¿por qué nadie se atreve a formulas dichas preguntas? Mi respuesta es bien simple y sencilla. Miedo. Tenemos miedo a descubrir que el mundo en su conjunto sea una mentira en la que nos vemos envueltos y de la que no somos capaces de salir.  Porque el miedo, ese sentimiento irracional – como muchos otros –, es un fuerte catalizador de las acciones humanas, que en gran medida se ven influidas por él.

Y aún así, a pesar de que creemos que nuestra realidad no sea más que un sueño nos esforzamos en conseguir llevar a cabo esos sueños que nos persiguen dentro del sueño que es nuestra realidad… Nos esforzamos en hacer de este un “mundo” mejor…

Porque si todo es un sueño, ¿a qué debemos aferrarnos para no perder las ganas de vivir?


viernes, 5 de agosto de 2011

Mil vidas...


Pensar en todo lo que ha habido antes, en todo lo que hay y lo que aún queda por haber. Pensar que han sido tantas las vidas que se han apagado, las mentes brillantes que han recorrido el mundo a lo largo de la historia. 

Es una contradicción que la vida sea tan corta siendo el mundo tan grande, con tantas cosas que ofrecer… Cosas que están en constante cambio… ¿Quién hizo del mundo lo que es hoy? ¿Una pregunta difícil? No, más bien simple. Nosotros hicimos esto, lo llevamos por este camino lleno ahora de tecnologías cada vez más brillantes… Pero, ¿qué es del mundo de antaño? ¿Dónde queda el pensamiento humano de la antigua Grecia, la filosofía de Descartes…?

¿Nadie ha pensado nunca en dar marcha atrás en el tiempo? ¿Viajar a lugares lejanos y perderse en los mares del tiempo? ¿Cuánto de lo que conocemos es verdad? ¿Cuánto queda aún por descubrir?... Preguntas y más preguntas rodean la existencia del hombre… Siglos de vida con personajes peculiares que han marcado el curso de la historia y otros que murieron en el anonimato solo por ser personas normales y corrientes…
Vivir mil vidas… Conocer esos secretos que se esconden en una historia interminable y todavía desconocida en su mayoría… “Duda lo cierto, admite lo dudoso” dijo una vez Shakespeare, una frase que se aplica muy bien a todo lo que sabemos sobre la humanidad, siglos de derrotas y batallas ganadas, mentiras y engaños, fraudes y denuncias, injusticias… 

Solo sueño con vivir mil vidas…